En medio de la devastación dejada por el reciente paso del huracán por Acapulco, la solidaridad y la compasión de la nuestra comunidad se han manifestado. La tragedia ha movilizado a personas de todas partes, quienes han respondido con generosidad para ayudar a los damnificados y contribuir a la reconstrucción de la zona afectada.
Los estragos del huracán han dejado a numerosas familias sin hogar, infraestructuras dañadas y comunidades enteras sumidas en la incertidumbre. En este contexto, diversas organizaciones sin fines de lucro, instituciones gubernamentales y voluntarios locales se han unido para brindar asistencia inmediata a aquellos que más lo necesitan.
Por ello, la Universidad Marista fungió como centro de acopio para recibir todo el apoyo de nuestros estudiantes y vecinos quienes pusieron un grano de arena para nuestros hermanos en Guerrero. Recibimos en nuestra institución alimentos como: enlatados, arroz, sopas, frijoles, lentejas, alimento para perros y gatos, agua embotellada, papel higiénico, artículos de limpieza personal y de limpieza del hogar, ropa y demás productos de primera necesidad que en estos momentos se requieren más que nunca.
Para hacer llegar la ayuda a las costas de Guerrero el UMAbus partió rumbo a la Marina Nacional, donde nuestro personal entregó de propia mano los víveres para su posterior empacado y entrega a los que más lo necesitan.
A pesar de la magnitud de la tragedia, la respuesta unificada y la determinación de ayudar a reconstruir Acapulco brindan un rayo de esperanza en medio de la desolación. La ciudad se encuentra en un momento crucial de reconstrucción, pero con el apoyo continuo de la comunidad, se espera que la resiliencia y la solidaridad prevalezcan, llevando a Acapulco hacia una nueva etapa de recuperación y renovación.
Y como Jesús dijo: “Ama a tu prójimo como a ti mismo, y extiende tu mano para ayudar al necesitado, pues en cada acto de bondad encontrarás la gracia de Dios.”
Luis Enrique Guzmán Castro
Content Manager UMA