El miércoles 4 de septiembre, contamos con la participación de la Lic. Diana Maldonado, quien impartió la conferencia titulada “Design Thinking aplicado al diseño de productos y servicios”. Durante su presentación, enfatizó la importancia de diseñar con el usuario en mente: entender sus deseos, necesidades, frustraciones y expectativas. Resaltó que la investigación es clave para resolver problemas de diseño, ya que a mayor información, más efectivas serán las soluciones propuestas.
Diana explicó el Design Thinking como una metodología y herramienta fundamental para desarrollar productos y servicios. Subrayó la relevancia de la iteración en el diseño, es decir, la capacidad de retroceder pasos cuando sea necesario para asegurar que algo funcione. Asimismo, destacó que incluso cuando un producto parece terminado, siempre hay espacio para mejoras. En esta metodología, la empatía juega un papel central, ya que es crucial entender profundamente al usuario, investigando todo lo que lo rodea para ofrecer soluciones funcionales.
La ponente también hizo hincapié en la importancia del pensamiento divergente, que permite generar ideas y explorar posibilidades, y el pensamiento convergente, que se enfoca en evaluar, analizar y probar dichas ideas. Además, remarcó la relevancia de la sostenibilidad: optimizar y mejorar los recursos utilizados, evitando el desperdicio y generando productos o servicios rentables, sin perder de vista la ganancia esperada en el mercado.
Durante su intervención, Diana habló de los “lentes” del diseño en el Design Thinking: la deseabilidad (lo que quiere el usuario), la viabilidad (si es necesario lo que se plantea) y la factibilidad (si se cuentan con los recursos y cuáles serían los beneficios obtenidos). Relaciona estos conceptos con el Business Model Canvas, una herramienta clave para desarrollar propuestas de servicio, modelos de negocio o productos.
A continuación, introdujo el concepto de Service Design, señalando que, hoy en día, todos los productos deben verse como un servicio centrado en el usuario y su experiencia. El papel del diseñador, explicó, es asegurarse de que el usuario obtenga exactamente lo que necesita y espera. También subrayó que, entre la idea y el éxito, la venta es un paso crucial, y aquí es donde el Design Thinking juega un papel fundamental para crear el mejor producto o servicio posible para el mercado.
En este punto, enfatizó la importancia de prototipar y crear productos mínimos viables (PMV) que permitan probar el mercado sin agotar recursos, asegurando que, cuando el producto o servicio se lance, funcione según lo planeado. Poner a prueba estas soluciones, indicó, es esencial para aprender y lanzar la mejor versión posible.
Para cerrar, presentó un caso de éxito donde desarrolló un producto dirigido al mercado femenino: un sostén deportivo diseñado para prevenir lesiones, partiendo de una problemática común entre las mujeres.
La conferencia fue un valioso aporte para los estudiantes de diseño, destacando la relevancia del proceso creativo, la investigación y la constante validación de ideas antes de lanzarlas al mercado, pero sobre todo, la importancia de comprender al usuario final.
Mtro. Alejandro Taboada Mártinez Sotomayor
Coordinador de la Carrera de Diseño Gráfico