En México el 12 de diciembre conmemoramos el aniversario de la aparición de la Virgen María de Guadalupe a Juan Diego en el cerro del Tepeyac.
Hace casi 500 años atrás, cuenta la tradición que la virgen María se apareció ante un indígena de nombre Juan Diego en el cerro del Tepeyac. La Madre de dios solicitó que se edificara un templo en su nombre, para que ella estuviera cerca del pueblo mexicano e intercediera ante Dios Nuestro Señor.
Los siglos han pasado y la festividad sigue más viva que nunca. Las familias y vecinos se organizan y reúnen, haciendo de esta festividad un acontecimiento que se acompaña de misas, comida, música y espectáculos.
En la Universidad Marista de la Ciudad de México no se podía dejar pasar esta importante fecha, para ello se ofreció una misa ante la imagen tallada en piedra que engalana nuestro campus.
En punto de las 10 de la mañana comenzó el culto dónde a través de las lecturas se conoció un poco más de la vida de la Virgen en esta tierra; se relató la visita de María a su prima Isabel quien en ese momento se encontraba embarazada, al notar la llegada de María, su hijo Juan quien aún estaba en el vientre de su madre se regocijó y brincó de alegría, demostrando la luz y la pureza que representa la Madre de Dios.
El personal administrativo, maestros, personal de mantenimiento y la rectora de la Universidad Marista la Maestra Ana Gabriela Aguirre Franco, disfrutaron de esta ceremonia en la cual se habló de la importancia del trabajo en equipo y el fortalecimiento de las relaciones humanas para brindar una educación de calidad a la comunidad estudiantil.
Sin duda fue un momento muy emotivo en el que se da gracias de poder celebrar un año más con Nuestra Madre de Guadalupe y Dios Nuestro Señor.